Transmisión: la piedra de tope en el camino a descarbonización
Una mejor planificación estatal es la principal demanda de los actores del mundo energético que participaron del panel “Transmisión: el jugador clave”, en el encuentro “Descarbonizando Chile: cómo hacemos la transición energética”.
La generación de energía puede tardar entre uno a dos años, mientras que el desarrollo de las líneas de transmisión puede alcanzar un plazo superior a siete años de desarrollo. En eso coincidieron el investigador de la Universidad de Chile, Rodrigo Moreno: la gerente general de Statkraft, María Teresa González y Javier Tapia, director ejecutivo de la Asociación de Transmisores. Los panelistas de la jornada que transmitió La Tercera y Radio Duna recordaron la promesa de Chile de alcanzar la carbono neutralidad para 2050, compromiso que exige reducir la generación de gases contaminantes y avanzar en el desarrollo de nuevas fuentes de energía renovables y limpias. “La pregunta es: cómo hacemos esta transición, es decir, cómo llegamos a Net Zero. Porque estamos super claros en la meta, pero, donde no estamos tan claros es en cómo vamos a seguir esta trayectoria, dijo Rodrigo Moreno, investigador del Instituto de Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI) de la Universidad de Chile. Ahora, el debate se centra en determinar qué capacidad de transmisión necesita el país y qué tanto se puede hacer a nivel distribuido.
“Hay grandes bloques de generación que se van a instalar en lugares donde están los recursos, por ejemplo Atacama. Luego, hay una necesidad de transporte gigante para poder mover esos recursos donde están las demandas”, añadió el académico. Por su parte, María Teresa González, gerente general de Statkraft, empresa generadora de energía de Noruega, afirmó que la única forma de darle una vuelta a la crisis climática que atraviesa el mundo es acelerar significativamente el desarrollo de energías renovables y electrificar.
“De verdad que esta década es clave para no pasar el punto de no retorno que signifique finalmente un desastre climático y para eso necesitamos no solamente generar energía, sino que -también-necesita mos transportarla hacia los centros de consumo, porque los centros de generación están alejados de los centros de consumo, entonces es vital, para habilitar esta transición energética, que tengamos las carreteras -por así decirlo-para poder transportar la energía desde donde se produce”, aseguró la gerente general de Statkraft. Según la ejecutiva, para poder descarbonizar la matriz de Chile es necesario reemplazar 5 mil megas de carbón, por 15 mil de solar y eólica. “Esa es una cantidad enorme de proyectos y para ese desafío necesitamos sentarnos el Estado, el sector privado y la sociedad civil, porque al final del día tenemos que ponernos de acuerdo para destrabar estos nudos”, recalcó.
Cuatro mil kilómetros
Por su parte, Javier Tapia, director ejecutivo de la Asociación de Transmisores, puso énfasis en el retraso que existe en transmisión y la urgencia de planificación estatal. “El sistema de transmisión está estrecho y lo que queremos para el futuro no debería tener esas estrecheces. Se están haciendo algunas cosas, estamos confiando en una gran línea que se viene (Kimal-Lo Aguirre), pero fuera de eso todavía no tenemos nuevas noticias”, advirtió. En este sentido, el abogado explicó que hay cosas que las empresas pueden hacer, pero otras no. “Toda la planificación es materia del Estado.
De ahí nuestro llamado a que el proceso de planificación se haga mejor, de manera eficiente y más adelantada”, indicó. Enseguida, trajo a colación la necesidad de materializar cuatro mil kilómetros de líneas de transmisión. “Ese aterrizaje lo tiene que hacer el gobierno. Son cuatro mil kilómetros de líneas, pero dónde. Otro Kimal-Lo Aguirre, quizás hacia el norte y cómo hacemos el mix almacenamiento, hay que pensar en ese futuro”, comentó. Pero, según Rodrigo Moreno, no basta con instalar líneas, también hacen falta equipos. “Podemos aumentar la capacidad de transporte del sistema, entonces hay que empezar a modernizar la red e incorporar nuevas tecnologías, para producir un ahorro que nos permita transitar de forma más costo/ efectiva hacia Zero”, sostuvo.
Fuente: La Tercera – Ediciones Especiales