Reducción de parlamentarios: Estudio muestra cómo rebajar a 134 el número de diputados resguardando la proporcionalidad
De acuerdo a una investigación elaborada por académicos de la Universidad de Talca y Adolfo Ibáñez, existirían tres modelos para poder llevar a cabo la propuesta del Gobierno. El 31 de julio pasado, durante su última Cuenta Pública, el Presidente Sebastián Piñera anunció su decisión de aplicar urgencia a la reforma constitucional que permite reducir de 155 a 134 el número de diputados y mantener en 50 los senadores, ratificando de ese modo la propuesta que dio a conocer un año antes en la misma instancia.
“Impulsaremos con urgencia el proyecto enviado por nuestro Gobierno que reduce el número de parlamentarios”, dijo el jefe de Estado, algo que concretó el 17 de agosto, ocasión en la que ingresó a la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados las indicaciones para modificar dos mociones en esa línea y que ya estaban en curso.
En ese contexto, los académicos de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, Eduardo Álvarez-Miranda y Matías Moreno-Faguett y Jordi Pereira de la Universidad Adolfo Ibáñez, elaboraron un documento en el cual plantearon siete modelos que permitirían llevar a cabo esa iniciativa sin afectar la proporcionalidad del sistema electoral.
En el artículo, proponen un mecanismo neutral para dibujar distritos sin sesgo político, considerando su tamaño poblacional, que sean territorialmente compactos, y su composición territorial, con un polo urbano que incluya varias unidades pequeñas para evitar que los candidatos aseguren su elección sólo cubriendo las zonas más pobladas.Según los expertos, la propuesta del Gobierno implica reducir el número de escaños disponibles en la mayoría de los distritos, exceptuando los del extremo norte y sur, que se mantendrían en 3. En esa línea, aseguran que si es posible ajustar mejor el porcentaje de población y el porcentaje de escaños de cada distrito.
“Es decir, evitar la sobre o subrepresentación distrital. El ejemplo más recurrente es el de la región de Atacama, que con una población cercana a las 290 mil personas, escoge 5 diputados, mientras que en Tarapacá- con una población similar- se eligen sólo 3 diputados”, destacan.También destacan el caso de la Región Metropolitana, que con cerca del 40% de la población, sólo recibe el 30% de los escaños (47 de 155). En ese contexto, presentaron tres soluciones, de un total de 7, para llevar a cabo el cambio sin afectar la proporcionalidad de los territorios.
“La primera, que sería la menos invasiva, consiste en redistribuir los 134 escaños en los distritos actualmente existentes. Es decir, sin modificar los límites territoriales de los distritos. La segunda, implica modificar los límites de los distritos y asignar los 134 escaños, respetando sólo los límites entre las regiones”, indica el texto.
En ese caso, sostienen, se debería aumentar sustantivamente la cantidad de escaños para la Región Metropolitana, que en la actualidad es la región más subrepresentada. La tercera solución es similar a la anterior, pero con una menor dosis de centralismo, corrigiendo lo que sucede en la Metropolitana, pero sin afectar al resto de las regiones.
Primera solución
En la primera alternativa, los autores distribuyeron los 134 escaños en los distritos actuales en función de los pesos poblacionales de cada distrito. “El objetivo es aproximar a 0 la diferencia entre el porcentaje de población que representa cada distrito, y el porcentaje de escaños que se le asigna”, señalaron.
“Por ejemplo, si un distrito representa el 10% de la población, el ideal -si son 134 escaños totales- es asignar de 13 a 14 cupos. Lo que está de fondo en esta propuesta, es respetar el principio de una persona, un voto”, aunque advirtieron que dadas las características geográficas del país, conseguir una cifra de 0 es imposible.
En este caso, señalan que “la rebaja en el número de diputados afecta más a unas regiones que a otras. Por ejemplo, la región de Atacama -que es la más sobrerepresentada del país- reduciría sus diputados de 5 a 3. La Región Metropolitana, en tanto, mejoraría su representación, pues de concentrar sólo el 30% de los escaños, pasaría a agrupar el 36% (recordemos que la RM concentra el 40% de la población)”.
“El distrito más difícil de corregir es el 8, compuesto, entre otras comunas, por Maipú, Estación Central, Pudahuel. Este distrito concentra el 8.29% de la población con casi 1.5 millones de habitantes. En rigor, le debiesen corresponden 12 escaños para anular su evidente sub-representación”, agregaron.
Asimismo, destacan que “los distritos del extremo norte y sur quedan más sobrerepresentados. Si ya lo estaban con una Cámara de 155, la situación empeora con una Cámara de 134. En cambio, el resto de los distritos mejora de manera notable, y muchos de ellos se aproximan al valor de 0”.
“Por cierto, esta asignación de escaños está sujeta a críticas (…) este dibujo podría ser catalogado como centralista. No obstante, los habitantes de la Región Metropolitana y especialmente los del distrito 8, siguen en una situación de subrepresentación, aunque de menor magnitud comparada con la actual”, enfatizaron.
Alternativa 2 y 3
La segunda solución que señalan es distribuir los 134 escaños en distritos distintos a los actuales, respetando los límites geográficos de cada región y manteniendo el mínimo de 3 escaños asignados a los distritos de los extremos norte y sur. A juicio de los investigadores, esta es una alternativa “más invasiva” que la anterior,
“La ventaja es que reduce significativamente los niveles de subrepresentación. El margen para modificar los distritos es relativamente estrecho. No es posible hacerlo en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes, pues esos distritos reparten 3 escaños, que es el mínimo exigido”, dijeron.
En esa línea, “cualquier modificación en el dibujo territorial de esos distritos, implicaría un retorno al binominal e, incluso, el avance hacia distritos uninominales. Lo mismo sucede con Atacama y Los Ríos, que por sus pesos poblacionales, también recibirán tres escaños en esta nueva solución”.
Las intervenciones más significativas se dan en las regiones más grandes del país, arrojando casi la mitad de la subrepresentación actual. “Es decir, con esta solución pasaríamos de un 11% de escaños mal asignados, a sólo un 6.18%”, apuntaron, aunque también posee cierto sesgo centralista.
Finalmente, en la tercera solución, plantean ubicar a los 134 diputados en distritos diferentes. “En esta solución se intenta superar el centralismo de las propuestas anteriores. Se restringen los escaños asignados a la RM a 41, lo cual implica una reducción cercana al 14%, que representa la disminución promedio de la Cámara”.
Fuente: Emol.com