Insisten con reducción del impuesto a los combustibles
El Ejecutivo ajustó el Mepco para rebajar precios de las bencinas. Parlamentarios oficialistas insatisfechos.Pese a que el Gobierno decidió ajustar el Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Mepco) con el fin de reducir los precios de las gasolinas, los diputados oficialistas impulsores del proyecto de ley que busca rebajar el impuesto a los combustibles no quedaron satisfechos y seguirán adelante, pese a que su iniciativa es rechazada por el Ejecutivo, por expertos y por la oposición.
Impulsado por los independientes exUDI Alvaro Carter y proUDI Sandra Amar y el UDI Rolando Rentería, la iniciativa que busca reducir el tributo específico en un 50% mientras rija el estado de excepción más ocho meses, fue aprobado en general el 6 de julio por la Comisión de Hacienda por cinco votos contra tres (Giorgio Jackson, RD; Leopoldo Pérez, RN, y Marcelo Schilling, PS). Pero su articulado se rechazó y será repuesto en la sala de la Cámara, adelanta Carter.
‘Creo que la mayoría de los diputados está de acuerdo con este proyecto, porque es un impuesto que golpea a la clase media. El litro de bencina está a más de $900 y bajaría en $180 si se aprueba. La rebaja a través del Mepco es solo por esta semana. Si el gobierno quiere evitar seguir con las alzas en las próximas semanas, ¿qué va a hacer?’, plantea Carter.
Los críticos del proyecto plantean que es regresiva, pues beneficia a los de mayores ingresos que tienen auto –y mientras más autos, más los beneficia-, reduce fuertemente la recaudación tributaria en un periodo que se hace más necesaria que nunca, e incentiva el uso de combustibles fósiles, la mayor fuente de contaminación ambiental del país, Carter los retruca. ‘Decir que beneficia a los más ricos es desafortunado, es fácil hablar de los ricos y pobres, pero falta la clase media que es la mayoría del país que con esfuerzo se compra un auto’. ‘Los tecnócratas se equivocan: si baja la bencina, la gente no va a usar el dinero para salir más en auto, no van a contaminar más; lo usarán para pagar cuentas, alimentos, colegios. Este proyecto busca reactivar la economía’.
Reparos de expertos
Anoche Carter tuiteó anunciando que seguiría adelante con el proyecto. El primero en responderle fue Claudio Agostini, economista de la UAI: ‘Esa rebaja aumenta el daño a muchos chilenos que sufren por la contaminación, en especial a niños con problemas respiratorios. Un poco más de responsabilidad diputado, mire los datos!’
Invitado hace un par de semanas a la Comisión de Hacienda, Agostini sostuvo que rebajar el impuesto específico no garantiza que se traspase a los consumidores. Y puso como ejemplo lo ocurrido en 2000 en Illinois, EE.UU., donde se redujo un 5% por un año: los precios de la bencina solo bajaron 2,7%.
Alejandro Tirachini, académico de Ingeniería de la U. de Chile, también invitado a la comisión, sostuvo que el menor impuesto ‘no llegaría completo al consumidor, porque las distribuidoras no están obligadas a traspasarlo al precio’.
Estima que en un año el decil más rico recibiría por la rebaja unos US$413 millones, mientras que los primeros deciles obtendrían US$26 millones. Además, recalcó que la menor recaudación, que según el SII sería en torno a los US$ 1.000 millones, permitiría financiar 309 mil pensiones básicas solidarias, construir 3,5 hospitales o comprar 2.200 buses eléctricos.
La economista Michele Labbé, exfuncionaria de este gobierno, rechazó el proyecto: ‘No tiene ninguna lógica económica, sus razones son puramente políticas. Las personas ya tiene dinero en el bolsillo debido al IFE y a los retiros de los fondos de pensiones. Hay mucha liquidez’.
Fuente: La Segunda