21 Enero 22

Ingenieros chilenos proyectan contagios y dan cátedra al mundo

Profesionales de la U. de Chile –apoyados por el Ministerio de Ciencias y el Minsal son finalistas a importante premio internacional, tras idear diversos recursos para proyectar el uso de camas UCI, el desplazamiento en cuarentena de grupos de riesgo y hacer biovigilancia. La fórmula será nuevamente aplicada en la ola de contagios que vive Tarapacá y el resto del país.Durante el año pasado, el diario El Longino resaltó una valiosa investigación de la Escuela de Ingeniería de la U. de Chile, cuyo foco se puso en monitorear la movilidad de la población, durante las exigentes cuarentenas que se vivieron Tarapacá y principales ciudades del país. En esa ocasión, mostramos cómo los profesionales crearon un inédito sistema que optimizaba la búsqueda activa de casos asintomáticos en zonas críticas que eran precisamente de personas que, por ejemplo, por su sobrevivencia debían desplazarse todos los días.

Los profesionales también desarrollaron un programa especial para vigilar la respuesta de anticuerpos a las diferentes vacunas contra el covid-19 y, además, una metodología para orientar la asignación de pacientes entre hospitales a nivel nacional. Estas fueron tres soluciones creadas –en plena pandemia– por los investigadores del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI) y la Universidad de Chile, en colaboración con el Ministerio de Salud, el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, y la compañía de telecomunicaciones.

Fue este equipo el que ha sido seleccionado entre los finalistas del Premio Franz Edelman Award 2022, una nominación que –en sí misma– representa un reconocimiento internacional al trabajo conjunto y muldisciplinario que ha desplegado nuestro país para hacer frente a la crisis sanitaria.

RECURSOS ESCASOS

Leonardo Basso, director del (ISCI) y académico de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, explica que ‘desde el inicio de la pandemia, lo que buscábamos era ir más allá de la predicción con modelos sofisticados, y generar herramientas que permitieran tomar mejores decisiones y utilizar mejor los escasos recursos en todos los niveles’, sostuvo. ‘Este trabajo colaborativo impactó fuertemente en la capacidad de respuesta que hemos tenido como Gobierno para enfrentar la pandemia; la prevención de contagios, la gestión de capacidad de las Unidades de Cuidados Intensivos y la estrategia de vacunación contra el Covid-19’, ha reconocido el propio ministro de Salud, doctor Enrique Paris.

Por su parte, el ministro de Ciencia Andrés Couve destacó que el desarrollo de la ingeniería aplicada fue un ejemplo chileno ‘del ejemplo del impacto que tuvo la generación de conocimiento y la colaboración de la comunidad científica articulada desde el Ministerio de Ciencia en la estrategia de Chile para el manejo de la pandemia’.

BÚSQUEDA DE CASOS

En junio de 2020, hacia final de la primera ola de infecciones, la autoridad sanitaria cambió su estrategia de pruebas PCR hacia una focalizada en la búsqueda activa de pacientes asintomáticos en el espacio público. Fue así como el Ministerio de Salud, el Ministerio de Ciencia y el ISCI firmaron un convenio de colaboración que permitió combinar datos epidemiológicos y, posteriormente este mismo trabajo permitió optimizar la búsqueda activa de casos asintomáticos en zonas de mayor riesgo:

El índice de riesgo ahora es una herramienta que también está disponible para las 16 autoridades regionales de salud y los 29 servicios de salud que forman e sistema público de salud.

VACUNAS Y CAMAS UCI

Otro aporte crucial se dio en la medición de la efectividad de las vacunas que se comenzaron a aplicar en el verano de 2021: Con esa finalidad, el ISCI y la Facultad de Medicina de la U. de Chile firmaron un convenio con el Minsal que impulsó un programa de vigilancia a la respuesta de los anticuerpos a diferentes tipos de vacunas y que ha podido identificar la baja constante de anticuerpos en vacunados con virus inactivado a partir de la tercera semana y tras la segunda dosis.

Una herramienta similar desarrolló también el ISCI para contar con un sistema de pronóstico de pacientes críticos y que guiara la asignación de Camas UCI entre hospitales, incluso transfiriendo casos entre ciudades para equilibrar la carga de recursos. Como explica el equipo de Leonardo Basso, se creó un sistema que realiza proyecciones de una y dos semanas, con alto grado de efectividad. En síntesis, es un capital de conocimiento local que aporta cierto nivel de tranquilidad, en medio de un nuevo peak de contagios, ahora por Ómicron.

Fuente: El Longino