Consumo eléctrico aumentó 44% en 32 comunas de Santiago
Según reporte del Instituto de Sistemas Complejos de la Ingeniería de la Universidad de Chile, sólo el 8% del aumento es consecuencia del coronavirus. Aunque cada invierno las familias chilenas saben que enfrentarán un aumento en sus cuentas de luz producto del frío y la mayor convivencia dentro de los hogares, este año el confinamiento producto del coronavirus ha impuesto una carga económica extra y perfectamente mensurable.
Así lo corrobora el estudio sobre la demanda a nivel residencial y de pequeño comercio en las 32 comunas urbanas del Gran Santiago, del Instituto de Sistemas Complejos de la Ingeniería (ISCI) de la Universidad de Chile. Según explica Rodrigo Moreno, doctor en Ingeniería por la Imperial Collage London, la información sobre horarios y consumo fue recogida de 326.000 medidores inteligentes operados por Enel, lo que permitió medir por separado el impacto de la pandemia.
‘Este es un análisis pionero, donde hemos cruzado varias bases de datos para analizar el impacto de las medidas asociadas a combate del Covid-19 en los diferentes sectores de la economía’, explica el investigador, quien agrega, ‘lo particular de este reporte, es que pudimos llegar a las casas, a las familias’. Las cifras son claras. ‘del 44 % de aumento respecto del año anterior, sólo un 8 % corresponde a la pandemia, mientras que el 32 % restante obedece al aumento estacional en el hemisferio sur producto del invierno’, desglosa. Sin embargo el aumento en el consumo no igual en todas las comunas.
En el sector oriente el crecimiento fue en promedio mayor que en las comunas de la zona poniente. El mejor ejemplo es Vitacura, que aumentó un 103%, en contraste con el 22% que promediaron las comunas del sector poniente. A eso, hay que sumar que las nuevas dinámicas sociales impuestas por la cuarentena, también tienen su reflejo en el consumo eléctrico.
El profesor Daniel Olivares, de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Católica, cuenta que de acuerdo a cada comuna, los horarios punta también han sufrido modificaciones. El horario peak de la mañana, que tradicionalmente se producía en todo Santiago en torno a las 8, se atrasó en toda la ciudad. Mientras en Las Condes se movió a las 9, en Renca fue a las 10 horas. ‘No sabemos con exactitud la razón del cambio, ni la diferencia en los nuevos horarios. Sin embargo, creemos que puede deberse a que en la zona oriente hay mejores condiciones para teletrabajar, lo que permite que las personas se conecten con sus empleadores más temprano’.
También se registró una segunda alza cercana a la hora de almuerzo, muy consistente en toda la ciudad, ‘lo que permite pensar que los santiaguinos están en actividades similares a esa hora’. Hasta el teletrabajo tiene espacio en esta lectura, ya que entre las 14 y las 16 horas se produce una notoria caída en el consumo energético. ‘Podría estar relacionado con el periodo de descanso entre los bloques de trabajo de mañana y tarde que se dan las personas’, reflexiona.
El peak de las 21 horas también se adelantó aproximadamente dos horas, aunque en forma más pareja entre las diferentes comunas. ‘Ahora que las personas no gastan tiempo en traslados desde y hacia su trabajo, se reúnen antes para hacer vida de familia’, finalizó.
Fuente: LUN