¿Aula segura?: estudio realizado en Chile revela respuesta inmune de escolares a vacunación
A más de un año de comenzar la inoculación contra el Covid-19 en Chile es innegable su efectividad, tal como evidencia el pionero estudio, el cual demuestra científicamente el comportamiento de los anticuerpos contra el SARS CoV-2 tras la vacunación de escolares de entre seis y 11 años, vacunados en su mayoría con Sinovac y de entre 12 a 18 años, quienes recibieron en gran parte Pfizer.
En palabras del doctor Juan Pablo Torres, parte del equipo interdisciplinario que reúne al Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería, ISCI: “Dado que Chile fue prácticamente el primer país occidental que comenzó vacunación en niños, la originalidad de los datos que obtuvimos es muy relevante. Teníamos evidencia referida a la muy alta seguridad de la vacuna, lo cual se ha confirmado con los datos de la vida real tanto en China como en países latinoamericanos; pero ahora evaluamos además si se generó una respuesta inmune a través de la detección de anticuerpos IgG contra el SARS-CoV-2”.
El estudio desarrollado por Leonardo Basso, director e investigador del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI) y Denis Sauré, investigador del mismo instituto, ambos académicos de la Universidad de Chile, equipo que también integra Marcela Zúñiga, asesora de la Subsecretaría de Redes Asistenciales del Ministerio de Salud, André Cazor, en representación del Ministerio de Educación y el doctor Juan Pablo Torres, pediatra infectólogo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, evidenció en un primer grupo que la seropositividad promedió un 86% (en específico, un 86% con Sinovac y 87% con Pfizer), en el siguiente grupo se alcanzó un 90.9% (en los inoculados con Sinovac fue del 85% y de 96% para quienes usaron Pfizer); y, en aquellos con comorbilidades se observó una presencia de anticuerpos superior al 90%, demostrando la efectividad de la vacuna.[1]
En la misma línea, Basso y Sauré comentaron: “El programa de vigilancia IgG que ISCI y Medicina de la Universidad de Chile llevaron adelante el año pasado, permitió levantar rápidamente información respecto del avance y efecto de la vacunación en Chile. Fue muy importante porque generó datos que no se iban a recabar en otras partes, ya que Chile era pionero en el uso de esas vacunas. La información permitió ver la buena respuesta inmune generada, pero también mostrar que posiblemente se iba a necesitar una dosis de refuerzo, comenzando por las personas mayores vacunadas con Sinovac. Desde el punto de vista pediátrico, se enfrentaba una situación similar: al ser Chile pionero en la vacunación, no habría información viniendo del resto del mundo. Este estudio genera dicha información con una metodología que ya dio frutos antes. Los resultados son tranquilizadores.”
El trabajo realizado por los investigadores aporta con evidencia científica la toma de decisiones en políticas públicas en Chile y, por qué no, a otros países, al ser uno de los primeros estudios de su tipo, de hecho, entrega información fundamental para lograr la promesa de un “aula segura” en el regreso a clases presenciales.
En la investigación participaron 1033 niños de entre seis y 11 años, y 1269 jóvenes de entre 12 y 18 años, a quienes, con el consentimiento de sus padres, se les hizo un test de detección rápida de anticuerpos IgG contra SARS-CoV-2 con el cual los investigadores obtuvieron datos, necesarios para el estudio, como: el esquema de vacunación, comorbilidades e información sociodemográfica. Los lugares definidos para la obtención de muestras se basaron en la movilidad de las ciudades con más densidad poblacional del país, información disponible en los estudios de movilidad realizados por ISCI y ENTEL Ocean desde el año 2020.
El estudio de seropositividad realizado en adultos fue publicado el año pasado en la revista Lancet Infectious Diseases y es parte de los seis finalistas del Franz Edelman Award 2022, reconocimiento internacional que celebra las intervenciones de la ingeniería aplicada más innovadoras y fundamentales para enfrentar la pandemia y sus efectos en el mundo.
[1] Se observó que los anticuerpos duran hasta 20 semanas en el cuerpo tras completar el esquema de vacunación (en Sinovac hay una leve disminución en comparación a Pfizer).
Fuente: La Voz del Norte