Alta evasión, menos pasajeros y congestión: 2022, otro año perdido para el desarrollo del Transantiago

Ministro de Transportes asegura que se está trabajando en estos focos y también en que la gente recupere la confianza en el sistema de movilización.

El transporte público de la RM vive días complicados. A la elevada cifra de evasión, que alcanzó un 40% en el primer semestre, se suma que las empresas de operadores de micros, según el ranking que elabora el Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM), alcanzan menos del porcentaje mínimo que se les exige por contrato para frecuencia y regularidad; además del incremento del parque automotor, que ha generado mayor congestión.

‘Está pasando en general por un mal momento’, resume Franco Basso, experto en transportes de la U. Católica de Valparaíso.

A lo anterior se añade que las cifras de transacciones realizadas este año en el sistema se mantuvieron lejos de volver a los niveles prepandemia.

Y es que si se registraban 1.562 millones en 2017 y 1.631 millones en 2018, en 2020 la cifra disminuyó a 570 millones y desde entonces no se ha vuelto a recuperar por completo. Incluso, en 2021 la cantidad subió solo en 184 millones, alcanzando 754 millones de transacciones.

Si bien para este año, con la flexibilización de las medidas de la pandemia y luego su eventual término, se esperaba que se pudiera volver a los rangos de antes, se está cerrando con aproximadamente 1.066 millones de transacciones, un 34,6% menos que en 2018.

‘El uso ha sido bastante más lento de lo que uno hubiese podido pensar. Las actividades están totalmente normalizadas en la ciudad y aun así tenemos una baja muy importante en términos de la utilización del transporte público’, menciona Basso.

Y añade que ‘lo que ocurrió, en gran medida, es que la gente con los retiros (de las AFP), con otras ayudas estatales, se compró un automóvil con mucho esfuerzo y está bastante reportado en la literatura que una vez que una persona se sube a un automóvil es muy difícil que se pueda bajar’.

El director de Ingeniería Industrial de la UDP, Louis de Grange, dice que este mal momento, en realidad, ‘ha sido la historia del Transantiago. El mejor año fue en 2008, salvo la pandemia, porque estaban las calles vacías y no había pasajeros, pero el Transantiago, fuera de eso, se ha deteriorado en todos los indicadores: tiempo de viaje, regularidad, costos y afluencia de pasajeros. Todos los indicadores son peores y lo más preocupante es que no se han dejado de deteriorar’.

Con nueve meses en el cargo, el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, dice que han implementado diferentes medidas, tanto en regiones como en Santiago, que ‘permiten ver que la demanda se está recuperando paulatinamente, estando aún lejos del período previo a la pandemia, pero en mucho mejor pie que a la misma fecha del año pasado’.

Licitación

Yendo a aspectos más técnicos, aún no salen las licitaciones para administrador financiero del transporte público, pese a que, según aseguran personas de la administración anterior, los documentos que establecen las bases de la licitación estaban casi listos para ingresar antes del cambio de gobierno.

Según la Contraloría General de la República (CGR), la denominada Resolución 10, de 2021, que aprueba las bases de la licitación del administrador financiero del transporte, ingresó a estudio a la CGR en abril de 2021, pero fue retirada por el ministerio en septiembre de ese año y no ha vuelto a ingresar, y mientras el ente fiscalizador no estudie dichos documentos, la cartera no puede llamar a licitación.

Desafíos

‘En resumen, hay pocos resultados que mostrar este primer año. Esperemos que tome más velocidad el año 2023’, afirma Juan Carlos González, jefe de gabinete del ministerio en el segundo período presidencial de Sebastián Piñera.

A juicio del exfuncionario, este año el Ejecutivo ‘optó por dar continuidad a los proyectos que venían desarrollándose desde la gestión anterior (…). Hace pocos días empezó la puesta en marcha de los nuevos contratos provenientes de la licitación 2021, lo que podría conllevar una mejora en los indicadores de las empresas’.

González comenta que si bien ‘no hubo buenas noticias en la evasión, se anunció un plan que habrá que evaluar en un semestre más. De aquí a fin de año aún puede haber algunos avances legislativos en el tema de plataformas, CATI y subsidios, ya que el Ejecutivo, en general, ha estado poco eficiente en este rubro’.

Basso, en tanto, menciona que ‘el desafío próximo va, por una parte, en tratar de disminuir la evasión. Es el foco número uno desde un punto de vista de gestión. Pero, por otra parte, tratar de atraer nuevamente a usuarios que pudieran haber dejado de utilizar el transporte público, de modo que podamos, a lo menos idealmente durante el próximo año, recobrar la cantidad de usuarios que había prepandemia’.

De Grange observa que ‘este ha sido el año de la bicicleta. Evidentemente, ha sido la prioridad del Ministerio de Transportes (…), siendo que es un porcentaje muy reducido de personas. Y problemas grandes como, por ejemplo, la evasión, la calidad del servicio, no han tenido la importancia que debiesen tener’.

Por su parte, el ministro Muñoz dice que tienen ‘planes concretos’ para reducir el impacto de la evasión del pago en las micros. ‘Otro desafío es la congestión en todas las ciudades a lo largo del país, lo que responde al explosivo aumento del parque automotor durante la pandemia. También pretendemos continuar recuperando la confianza de los usuarios en el sistema. Finalmente, estamos mirando especialmente la situación en zonas rurales’.

Fuente: El Mercurio